Los aftas en la boca o llagas son lesiones que aparecen en la cavidad bucal causando dolor al comer, molestias al hablar o cierta incomodidad al cepillarse los dientes.
Las aftas no son contagiosas y las zonas más comunes en las que suelen aparecer son los labios, el interior de
las mejillas, las encías, la lengua y en otras ocasiones, puede incluso afectar al paladar.
CAUSAS
Su origen es desconocido, pero se relaciona con una reacción inmunológica frente a las bacterias comunes de la flora bucal, el estrés, cambios hormonales, la falta
de vitaminas y padecer alergias alimentarias.
TIPOS
Aftas menores, tienen un borde rojo y una forma ovalada y se curan en una o dos semanas sin dejar
cicatrices.
Aftas herpetiformes, poco frecuentes y de dimensiones reducidas. Las padecen personas de edad más avanzada. Suelen aparecer en grupos, llegando incluso a unirse formando una gran úlcera.
Aftas mayores, son menos frecuentes y son más profundas que las anteriores, suelen ser redondas y
tienen definidos los bordes. Pueden tardar en curarse alrededor de 6 semanas dejando cicatrices importantes.
¿Cómo prevenirlo?
Mantener una buena higiene bucodental, usando
cepillos suaves y procurar reponerlos con cierta regularidad.
Llevar una dieta equilibrada ingiriendo alimentos que aporten niveles adecuados de vitamina B, zinc y hierro.